
Como en cada pueblo, es habitual encontrarnos con vehículos abandonados desde hace meses, e incluso años en el casco urbano, los cuales no solo entorpecen el flujo de transitabilidad, sino que además afean los espacios en donde se encuentran. Nuestra ciudad no es la excepción, e incluso en algunas zonas, como uno de los accesos a la Laguna (centro turístico por excelencia de Ranchos), suma periódicamente autos inutilizables, que empañan la belleza del lugar.
Desde el municipio local nunca surgió una iniciativa para solucionar este problema, al igual que desde el Concejo Deliberante no existe una exigencia para que se apliquen las leyes u ordenanzas vigentes (o bien, se cree alguna nueva); sin embargo, en las últimas horas, el vecino municipio de General Belgrano, informó sobre las medidas que se vienen aplicando, y que son dignas de imitar:
“En el marco de las acciones que se vienen realizando en materia de seguridad vial y control urbano, agentes municipales pertenecientes a la Dirección de Control y Fiscalización realizaron, en los últimos días, el retiro y secuestro de varios vehículos que se encontraban en estado de abandono en distintos barrios de nuestra ciudad.

Dichos vehículos fueron trasladados al depósito municipal donde quedarán alojados hasta que los titulares regularicen la situación de los mismos. De acuerdo a la Ley Provincial N° 14547, transcurridos 180 días desde el secuestro, si el titular del mismo no regulariza el pago de los cargos correspondientes se procede a la compactación del vehículo y se traslada a Planta de Reciclado para su venta o disposición final. De esta manera la Municipalidad de General Belgrano continúa con sus políticas activas en la materia en procura de mantener orden y seguridad en la vía pública”, afirman desde el Municipio encabezado por Osvaldo Di Nápoli.