
Con abrumadora mayoría, el Senado de la Nación le asestó un nuevo golpe político a Javier Milei al rechazar su veto a la ley de emergencia en discapacidad. Con 63 votos a favor y solo 7 en contra, la votación reinstaló la norma que garantiza derechos y cobertura a las personas con discapacidad. La decisión parlamentaria unió al kirchnerismo, la UCR, gran parte del PRO y bloques provinciales, dejando prácticamente aislados a los libertarios. Hacía 22 años que el Congreso no lograba anular un veto presidencial, hito que evidenció la creciente fragilidad del oficialismo en el parlamento.
La discusión en el Congreso de la Nación estuvo signada por denuncias respecto de que el Gobierno habría manipulado información para dar de baja pensiones por discapacidad, que debían seguir activas. El tema fue presentado en el programa «QR!», donde se subrayó que los recortes en pensiones afectaron incluso a votantes de Milei, generando malestar dentro y fuera del oficialismo e incluso entre sus propios votantes.
Jonathan Yeferley, —conocido como Jony de la silla—, es un hombre que nació con osteocondromatosis múltiple, enfermedad que lo dejó en una silla de ruedas a sus 18 años. En comunicación telefónica con el programa que se emite por Bravo TV de lunes a viernes a las 22, el joven expresó: “Esto fue un respiro, una esperanza. El problema no era individual sino colectivo. Nos paramos de manos porque no aguantamos más esta situación”, relató, y luego criticó la falta de sensibilidad del oficialismo: “Este Gobierno no se cansa de pegarnos. Nos maltratan incluso con el lenguaje, usando la palabra ‘discapacitado’ como un insulto. No somos débiles ni pobrecitos, sino ciudadanos con derechos”, enfatizó.
Jony también apuntó contra la lógica del ajuste: “El Gobierno dio de baja pensiones incluso a los votantes de Milei. Personas que lo eligieron como presidente se quedaron sin apoyo para sus hijos. Eso demuestra que la crueldad no tiene grieta”, razonó.
Frente a las amenazas de que el Gobierno demoraría e incluso judicializaría la implementación de la norma, las distintas organizaciones de personas con discapacidad anticiparon que seguirán presionando para que la ley no quede en letra muerta y sea puesta en vigor de inmediato. Además, preparan la presentación de amparos judiciales individuales y colectivos para garantizar la aplicación de los derechos, según contó Jony.
“No podemos esperar un año. Si la ley no se aplica ahora vamos a tener gente muerta. Por eso vamos a seguir en la calle y también en la Justicia, con amparos y con organización colectiva”, advirtió. El referente cerró con un mensaje claro: “Queremos una Argentina inclusiva y humana. No pedimos privilegios sino dignidad: trabajo, vivienda y salud. La discapacidad no puede ser usada como variable de ajuste”, apuntó.
LB / FPT
