La Secretaría de Energía ultima detalles para implementar un sistema que simplificará las tarifas, eliminando las categorías de segmentación. El nuevo modelo, que podría comenzar en abril, se centrará en la tarifa social, dejando a millones de hogares sin subsidios.
La Secretaría de Energía de la Nación avanza en un nuevo esquema tarifario que reemplazará al sistema de segmentación establecido por Sergio Massa. Según fuentes oficiales, el modelo entraría en vigencia el 1 de abril y se basará en un esquema más simple, similar al implementado durante el gobierno de Mauricio Macri.
El plan, impulsado por la nueva secretaria de Energía, María Tettamanti, eliminará las actuales categorías tarifarias N1, N2 y N3, dejando una división binaria entre usuarios subsidiados y no subsidiados. La tarifa social será el principal mecanismo para proteger a los sectores más vulnerables.
De acuerdo con los lineamientos propuestos, el nuevo esquema incluirá a todos los actuales N2 (usuarios de bajos ingresos) y a una porción de los N3 (usuarios de ingresos medios). Esta ampliación busca cubrir hasta un 40% de la población, en línea con la proporción actual de hogares por debajo de la línea de pobreza.
“La idea es que el porcentaje de usuarios subsidiados sea dinámico y se ajuste a los índices de pobreza. Si la pobreza disminuye, también lo hará el universo de beneficiarios de subsidios”, señalaron fuentes del sector a este medio.
Impacto en los usuarios
En la actualidad, el 42% de los usuarios eléctricos se encuentran en la categoría N1 (sin subsidios), el 39% en N2 y el 19% en N3. Si se adopta el nuevo esquema, una porción significativa de los usuarios N3 pasaría a la categoría sin subsidios. Entre julio de 2024 y abril de 2025, alrededor de 3,7 millones de usuarios eléctricos podrían perder el beneficio estatal.
En el caso del gas natural, el impacto sería similar. Actualmente, el 44% de los usuarios están en N1, el 33% en N2 y el 24% en N3. Durante el mismo período, se estima que 1,5 millones de hogares dejarían de recibir subsidios.
El Registro de Acceso a los Subsidios de Energía (RASE), implementado por el gobierno anterior, también influyó en la pérdida de subsidios. Unos 1,7 millones de usuarios que figuraban como N2 pero no completaron su inscripción en el RASE fueron reasignados a la categoría N1, perdiendo la totalidad del beneficio.
Con información de mase, redactado y editado por un periodista de adnsur.
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